El autosabotaje: cómo lo identifico y qué hago con él

Te había prometido comenzar ese proyecto, iniciar una rutina saludable o abrirte emocionalmente con alguien importante, pero cuando llega el momento, algo ocurre: olvidas la tarea, encuentras mil excusas o sientes un temor paralizante. Bienvenido/a al mundo del autosabotaje.

El autosabotaje no es más que una forma en que nuestra mente intenta protegernos. Puede tener raíces en miedos profundos como el miedo al fracaso, al éxito o al juicio de los demás. Pero, al protegernos, también nos limita. Nos mantiene en la zona de confort, lejos del riesgo... y también lejos del crecimiento.

Identificarlo es el primer paso. Hazte estas preguntas:

• ¿Hay una meta que continuamente pospongo sin razón aparente?

• ¿Me cuento historias para justificar por qué no avanzo?

• ¿Siento miedo o ansiedad cuando pienso en lograr lo que deseo?

Si has respondido sí, el autosabotaje podría estar jugando un papel importante en tu vida.

Entonces, ¿qué hacer con él? Aquí algunos pasos:

1. Reconoce el miedo: Identifica qué es lo que te da miedo. Escríbelo. A veces, ponerlo en palabras hace que pierda poder.

2. Pequeños pasos: Divide tus metas en pasos pequeños y manejables. Cada acción cumplida refuerza tu confianza.

3. Busca apoyo: Habla con alguien de confianza o un profesional. Compartir lo que sientes te ayudará a ver las cosas con perspectiva.

4. Practica el autocompromiso: Cúmplete pequeñas promesas a diario. Estas acciones fortalecen tu compromiso contigo mismo/a.

El autosabotaje es una señal de que algo dentro de ti necesita atención. Cuando en lugar de ignorarlo eliges explorarlo, das el primer paso para liberarte y acercarte a lo que realmente quieres lograr.

¿Qué es lo que hoy podrías dejar de sabotear?